José Antonio Granero

Arquitecto. Socio fundador de CGR Arquitectos donde desarrolla desde 1990 su actividad profesional en los distintos ámbitos de la Arquitectura y el Proyecto Urbano. Ha participado como socio e impulsor en otros proyectos empresariales relacionados con la promoción inmobiliaria, el emprendimiento y la formación.

Apasionado de Madrid como espacio de oportunidad, es un  convencido del papel de los profesionales en la sociedad civil. En medio de la crisis que arrasó la actividad económica y la arquitectura en España, promovió una candidatura de refundación del Colegio de Arquitectos de Madrid, bajo el lema Abierto, siendo elegido Decano en 2011. En su mandato (2011-2015) ha liderado un proceso de transformación, convirtiéndolo en un referente institucional y espacio de encuentro profesional y ciudadano,vinculando la actividad social, cultural y económica con la participación de personajes de la vida pública, empresas e instituciones de todo lo relacionado con la ciudad.

Ponente en Congresos sobre arquitectura, ciudad y actividad profesional. Patrono y consejero de varias empresas e instituciones, es colaborador habitualen medios de comunicación y profesor invitado de varias universidades en programas de posgrado.Ha recibido varios premios y su obra aparece en publicaciones especializadas.

www.cgrarquitectos.com

Reseñas del capítulo:

¨Todos queremos ser hombres de nuestro tiempo, y compartimos una voluntad de actuar en la transformación de nuestro entorno, de trascender e influir… El futuro no es lo que va a pasar, es lo que vamos a hacer.¨

“… Avanzaba mi interés por el arte y la política, a la vez que por la técnica y la actividad económica. Parecían difíciles de congeniar, hasta encontrar en la Arquitectura su espacio mágico.”

“Como arquitecto me gusta hablar de belleza, de identidad y de emociones. En arquitectura todo debe cumplir una función y la emoción es una función, que está íntimamente ligada a la educación y la cultura. Sin ellas será muy difícil aspirar a un mundo mejor.”

 “Los tiempos no son malos ni difíciles, los tiempos somos nosotros, tales somos nosotros tales son los tiempos, dice San Agustín. Lo más importante es la actitud ante la vida, la mía es de disfrutar de la vida, de entusiasmo, pasión y optimismo. De hecho he aprendido mucho de los éxitos, pero sobre todo de los errores y fracasos, tanto que creo que voy a seguir cometiendo nuevos.”

“Es fundamental soñar con la ambición de crecer y siempre lo he hecho de modo compartido.”
“He llegado a ser un buen conector de personas valiosas y lanzador de ideas y proyectos. A eso me dedico y es en lo que quiero seguir trabajando, siempre en compañía de otros.”